domingo, 1 de marzo de 2009

Un abrazo al alma



No encuentro las palabras para describir mi sensación, desde hace tiempo por azar del destino me he acercado al Budismo, escuchado a Dalai Lama y a monjes. En cada ocasión escucho algo que se me tatua en el pensamiento, en el alma.


Parecen conceptos sencillos y a la vez difíciles, pero en realidad cada uno de ellos se impregna de propia forma en cada quien.

Dalai Lama, dice que todas las religiones son buenas, todas tienen un objetivo en común: Ser Mejores Personas.

Hay enseñanzas que me conmueven: "el perdón no existe como concepto en el budismo tibetano porque de principio nunca haré nada concientemente para herirte por tanto nunca te voy a pedir perdón" ¿no es hermoso?

"cuando comprendes que nada ni nadie te pertenece, tu relación con el mundo es distinto" y claro, cómo no serlo, saber que no me perteneces me hace amarte profundamente cada segundo que estas junto a mi.

"la misión en la vida es ser feliz, la vida es bella, la naturaleza es bella, el mundo es bello, si vemos con el corazón"

"es fácil, estar enojado, estar triste, es fácil culpar a los otros, es fácil llorar... el trabajo y lo difícil es buscar la sonrisa, es estar feliz, es responsabilizarnos de nuestros errores, es levantarse en la mañana y realmente creer que es el mejor día"...


Mi suerte consiste en escuchar de primera mano estos conceptos, con explicaciones sencillas, con ejemplos del día a día. Así entiendo mi mundo.

Hoy estuve frente a las reliquias, mi corazón se alegró, me sentí abrazada, mi ser inestable quedo quieto, mi mente se detuvo, cual niña que encuentra una mano a la cual tomarse, sentí tanto amor.

Las reliquias son formaciones cristalinas en forma de perlas, recuperadas de entre las cenizas de la pira funeraria del Buda Shakyamuni, Buda Kasyapa, los discípulos del Buda histórico, Shariputra y Ananda y otros grandes maestros budistas Indios y Tíbetanos, tales como Nagarjuna, el Bodhisattva Chophak, Lama Atisha, Yeshe Tsogyel, Milarepa, Geshe Chekhawa, Lama Tsongkhapa, Gyalwa Ensapa, Su Santidad el Primer Karmapa, Pabongka Rinpoche, Lama Thubten Yeshe y Geshe Lama Konchog
No se si soy buena persona, no se si algún día lo lograré, pero procuro no hacerle daño a nadie y si lo hago juro que no fue concientemente y me disculpo de todo corazón.